La creciente ola de desapariciones en carreteras mantiene en vilo a la población de Nuevo León. En los últimos días, nuevos casos se han sumado a la ya preocupante lista de personas no localizadas, particularmente en las rutas que conectan la entidad con la frontera de Tamaulipas. La inseguridad en las vías federales se ha convertido en un foco rojo que exige respuestas inmediatas de las autoridades.
Dos Nuevos Casos De Desapariciones En Carreteras En La Región
Mientras aún resonaba el caso de los cinco músicos y su chofer, integrantes del grupo Los Juniors de Monterrey, quienes días atrás regresaron a sus hogares tras haber sido secuestrados y golpeados, surgieron nuevos reportes de desapariciones en carreteras. Esta vez, cuatro personas fueron reportadas como no localizadas la misma noche de los hechos anteriores, pero en un tramo distinto: la carretera libre a Reynosa.
Las autoridades confirmaron que los nuevos incidentes involucran dos situaciones distintas: por un lado, la desaparición de un enfermero que viajaba solo rumbo a Reynosa; por el otro, el caso de tres mujeres que regresaban juntas a esa misma ciudad fronteriza. Aunque no existen pruebas de que ambos casos estén relacionados entre sí, la coincidencia geográfica y temporal incrementa la inquietud entre los habitantes.
Enfermero Desaparece Camino A Reynosa
El primer caso involucra a Pedro Antonio Lorenzo Martínez, de 48 años, enfermero con dos décadas de experiencia laboral en el Hospital General Regional No. 270 del IMSS, ubicado en Reynosa. El domingo por la tarde, alrededor de las 18:00 horas, Martínez salió de Cadereyta conduciendo su camioneta Nissan Rogue blanca, con destino a su casa.
Durante el trayecto, su familia perdió contacto con él. Las autoridades informaron que los primeros indicios apuntan a que pudo haber desaparecido a la altura de Los Ramones, aproximadamente 70 kilómetros después de Cadereyta. No obstante, el último punto confirmado en la denuncia fue la Colonia Ejido Cadereyta, donde fue visto por última vez.
¿Quiénes Exigen Búsqueda Inmediata Del Enfermero?
La desaparición del enfermero generó una rápida movilización de sus compañeros. Decenas de trabajadores de la salud realizaron una protesta pacífica frente al hospital en el que laboraba, ubicado sobre la carretera Reynosa-San Fernando. Exigieron a las autoridades acelerar su búsqueda, recordando que las desapariciones en carreteras afectan no solo a los viajeros ocasionales, sino también a quienes por cuestiones laborales recorren estos caminos todos los días.
El gremio de salud expresó su temor ante el creciente peligro que representa circular por esta zona. Muchos trabajadores médicos residen en Tamaulipas y laboran en instituciones de Nuevo León, viéndose obligados a atravesar rutas que se han vuelto cada vez más peligrosas.

Tres Mujeres Desaparecen La Misma Noche
El segundo reporte involucra a tres mujeres que también fueron reportadas como desaparecidas la noche del domingo. Viajaban en un Ford Fusion 2011 gris oscuro. Las identificaron como Natalia Gisela Ramírez Nolasco (50 años), María de la Luz Lara Lara (48 años) y Teresa Lizbeth Pérez Fuentes (26 años), todas originarias de Reynosa.
Según familiares, por la mañana visitaron San Bartolo, en Cadereyta, y durante el regreso, aproximadamente a las 22:00 horas, se comunicaron para informar que su vehículo había sufrido una falla mecánica en plena carretera. Luego de ese último contacto, no se volvió a saber de ellas.
Hasta el momento, no se han emitido fichas de búsqueda oficiales, lo que ha generado mayor angustia en sus familiares. Nuevamente, las indagatorias preliminares sugieren que su desaparición ocurrió cerca de Los Ramones, lo que refuerza el patrón repetitivo de desapariciones en carreteras en esa misma franja.
La Carretera Libre A Reynosa, Punto Crítico
La carretera libre a Reynosa se ha transformado en uno de los tramos más peligrosos del noreste mexicano. Las recientes desapariciones en carretera solo confirman un problema que, aunque conocido por la población local, parece seguir desbordando la capacidad de las autoridades para contenerlo.
Este corredor, vital para trabajadores, comerciantes y familias que se desplazan entre Nuevo León y Tamaulipas, se ha convertido en un escenario recurrente de asaltos, privaciones ilegales de la libertad y secuestros. Diversas organizaciones civiles han denunciado que las desapariciones en carreteras no reciben suficiente cobertura mediática, pese a que la frecuencia de estos casos sigue en aumento.
Fiscalía Inicia Investigaciones Formales
Tras recibir las denuncias, la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León abrió investigaciones sobre ambos incidentes. En el caso del enfermero, ya se emitió una ficha de búsqueda oficial, mientras que en el caso de las tres mujeres aún se espera la publicación de sus respectivas alertas.
Aunque oficialmente no se ha establecido conexión entre los dos casos, la cercanía de los hechos y el área donde ocurrieron despiertan sospechas sobre la posible participación de grupos criminales que operan en la zona. Las autoridades manejan varias líneas de investigación, incluyendo la participación de bandas dedicadas al secuestro exprés y la desaparición forzada, prácticas tristemente comunes en estos corredores viales.
Crece La Indignación Social Ante Desapariciones En Carreteras
El temor y la frustración se extienden entre la población. En redes sociales, ciudadanos de Reynosa y Monterrey expresan diariamente su preocupación por la falta de garantías de seguridad al salir a carretera. Las familias de los desaparecidos han impulsado protestas, marchas y bloqueos pacíficos en un intento desesperado por ser escuchados.
La gravedad de las desapariciones en carreteras ha alcanzado tal dimensión que incluso agrupaciones dedicadas a la búsqueda de personas han solicitado intervención federal para reforzar la vigilancia en las rutas de mayor riesgo.
Aumentan Los Casos Sin Resolver En Nuevo León
La reciente desaparición de los integrantes de Los Juniors de Monterrey, ocurrida apenas días antes, había encendido las alarmas por el modus operandi utilizado. Aunque ese grupo pudo regresar con vida tras horas de cautiverio, los nuevos casos dejan en evidencia que el fenómeno de las desapariciones en carreteras está lejos de detenerse.
A medida que más casos se acumulan en los registros oficiales, la sensación de vulnerabilidad crece entre los habitantes. Muchos se cuestionan si salir de casa para cumplir actividades cotidianas como trabajar, visitar familiares o vacacionar seguirá representando un peligro permanente.
El problema ya no afecta únicamente a sectores marginados. Ahora involucra a profesionistas, mujeres, trabajadores de la salud, jóvenes y familias completas, todos víctimas de esta crisis de inseguridad que se extiende por las principales carreteras de la región.