La disponibilidad de agua en Nuevo León se encuentra en una situación preocupante. A pesar de los esfuerzos de la población por reducir su consumo, las fugas en el sistema de distribución representan un obstáculo significativo para garantizar un suministro adecuado.
Aumento Alarmante de Fugas
De acuerdo con Agua y Drenaje de Monterrey, en el año 2023, el 17% del agua consumida en Nuevo León se perdió debido a fugas en las tuberías. Este porcentaje ha experimentado un aumento con respecto al 15% registrado en años anteriores, lo que indica una tendencia preocupante de deterioro en la infraestructura hidráulica.
Incumplimiento de Metas Establecidas
A pesar de los esfuerzos por parte de la ciudadanía para reducir el consumo de agua, los datos muestran que el desperdicio está considerablemente por encima de las metas autoimpuestas por las autoridades. Se esperaba cerrar el año 2023 con un índice de pérdida de agua entre el 7% y el 8%, pero los registros actuales indican que la realidad es mucho más desafiante.
Durante el año pasado, se atendieron aproximadamente 100,000 desperfectos relacionados con fugas de agua en Nuevo León. En el Área Metropolitana de Monterrey, se repararon 94,205 fugas, mientras que los municipios no metropolitanos reportaron 7,460 episodios de pérdida de líquido. Estas cifras reflejan la magnitud del desafío al que se enfrentan las autoridades para mantener operativo el sistema de distribución.
Un Llamado a la Acción Conjunta
El ambientalista Martín Bremer destaca la importancia de que tanto las autoridades como la población intensifiquen sus esfuerzos para abordar esta problemática. Si bien es alentador observar la disposición de la ciudadanía para reducir su consumo de agua, es imperativo que las autoridades redoblen sus esfuerzos en la reparación de fugas y la detección de tomas clandestinas.
La escasez de agua y los problemas de fugas en Nuevo León requieren una acción coordinada y urgente. Es fundamental que las autoridades prioricen la inversión en infraestructura hidráulica y adopten medidas eficaces para mejorar la eficiencia del sistema de distribución. Asimismo, la participación activa de la ciudadanía en la conservación y el uso responsable del agua es esencial para garantizar la sostenibilidad de este recurso vital en la región.
¿Qué Hacer Ante una Fuga de Agua?
Identificar la fuente de la fuga: Localiza la fuente de la fuga y asegúrate de que sea segura antes de intentar cualquier reparación.
Cerrar la válvula de paso: Si es posible, cierra la válvula de paso de agua para detener el flujo de agua hacia la zona afectada.
Controlar el agua: Usa toallas, cubos o recipientes para recoger el agua y evitar que se propague y cause más daños.
Comunicarse con las autoridades: Informa a la compañía de agua local o a las autoridades pertinentes sobre la fuga para que puedan tomar medidas para repararla.
Contactar a un profesional: Si la fuga es grave o está fuera de tu capacidad de reparación, contacta a un fontanero calificado para que realice las reparaciones necesarias.
Evaluar los daños: Una vez que la fuga esté reparada, evalúa cualquier daño que haya ocurrido y toma medidas para repararlo o mitigarlo según sea necesario.
Recuerda que la pronta acción puede ayudar a minimizar los impactos negativos de una fuga de agua tanto en tu propiedad como en el suministro público.