Marzo: El Mes Más Violento en lo que va del Año
Durante el mes de marzo de 2025, Nuevo León registró un alarmante aumento en el número de homicidios. Con al menos 87 asesinatos, el estado vivió su mes más violento del año, superando de manera significativa los 64 homicidios reportados en febrero. Este incremento del 27% en apenas un mes ha encendido las alertas entre la población y ha puesto en entredicho el discurso de las autoridades estatales, que insisten en que la violencia está bajo control.
El promedio diario de homicidios también reflejó el repunte: mientras en febrero se reportaron 2.2 asesinatos por día, en marzo la cifra subió a 2.8 diarios, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. A pesar de que marzo tiene más días que febrero, el alza se mantiene incluso si se promedia por jornada.
Nuevo León, Líder en Homicidios a Nivel Nacional
Uno de los datos más alarmantes del mes fue el registrado el 22 de marzo, cuando Nuevo León encabezó la lista nacional de homicidios. Ese día, el estado superó a entidades históricamente violentas como Guanajuato y el Estado de México, colocando a la entidad en una posición crítica en cuanto a inseguridad.
Esta situación contrasta con la narrativa promovida por el gobernador Samuel García y su equipo, quienes han insistido en que los delitos de alto impacto, particularmente los homicidios, han venido disminuyendo de forma sostenida. Sin embargo, las cifras de marzo demuestran que la violencia no solo persiste, sino que ha repuntado de manera considerable.
Gobierno Insiste en Tendencia a la Baja
A pesar del aumento evidente en los homicidios durante marzo, las autoridades estatales continúan promoviendo una versión optimista. El Secretario de Seguridad estatal, Gerardo Escamilla, declaró recientemente que los homicidios y otros delitos de alto impacto están “en niveles de contención”. Según Escamilla, el primer trimestre de 2025 reflejó una disminución del 40% en homicidios, en comparación con el mismo periodo de 2024.
En total, entre enero y marzo de este año se contabilizaron 232 homicidios, frente a los 335 del primer trimestre del año pasado. No obstante, el repunte de marzo ha opacado cualquier percepción de mejora. La contradicción entre las cifras mensuales y los trimestres acumulados ha generado dudas entre la ciudadanía sobre la transparencia y coherencia de las estadísticas oficiales.
Hechos Violentos que Marcaron el Mes
El recuento de homicidios no es solo un número: cada caso representa una tragedia. Entre los crímenes que se registraron en marzo destacan varios hechos de alto impacto:
- El hallazgo del cuerpo de un hombre con huellas de tortura en un arroyo de Cadereyta.
- Un asesinato en la Colonia Altamira en Monterrey.
- Un homicidio en un domicilio particular en el municipio de Escobedo.
Estos casos se suman a una larga lista de hechos violentos que reflejan la persistente presencia de grupos criminales y la debilidad institucional para enfrentarlos.
El Segundo Año Más Violento: Un Contexto Preocupante
El año 2024 cerró como el segundo más violento en la historia reciente de Nuevo León, solo por debajo del año 2011, en plena “narcoguerra”. Incluso, superó en homicidios al año 2012, otro período marcado por la presencia del crimen organizado en la entidad.
Este contexto histórico hace que cualquier repunte, como el ocurrido en marzo, sea particularmente alarmante. Pone en evidencia que la estrategia de seguridad implementada por el gobierno estatal no ha logrado consolidarse ni prevenir ciclos de violencia, a pesar de los discursos triunfalistas.
Estrategias Cuestionadas y Falta de Resultados
La administración de Samuel García ha insistido en el uso de tecnología, inteligencia y coordinación interinstitucional como ejes de su estrategia de seguridad. Sin embargo, los resultados tangibles son escasos. El aumento de homicidios, sumado a otros delitos de alto impacto como secuestros, extorsiones y robos con violencia, ha sembrado dudas sobre la eficacia de estas acciones.
Especialistas en seguridad pública han señalado que uno de los principales problemas en la entidad es la falta de continuidad en las políticas de seguridad, así como la escasa presencia policial en zonas clave. Además, las pugnas políticas entre el ejecutivo estatal y otras instancias de gobierno han obstaculizado la generación de una estrategia integral y duradera.
Percepción Ciudadana: Miedo e Incertidumbre
Mientras las autoridades insisten en que la situación está bajo control, la realidad para muchos habitantes de Nuevo León es distinta. La percepción de inseguridad ha ido en aumento, especialmente en municipios como Monterrey, Guadalupe, Escobedo, Apodaca y San Nicolás.
Vecinos reportan balaceras frecuentes, presencia de personas armadas y una sensación constante de vulnerabilidad. Las redes sociales se han convertido en un espacio donde los ciudadanos comparten alertas, videos y testimonios sobre situaciones violentas, muchas veces antes que las propias autoridades den información oficial.
Una Brecha entre Discurso y Realidad
El incremento de homicidios en marzo de 2025 evidencia una preocupante brecha entre el discurso gubernamental y la realidad en las calles. Mientras se insiste en que la violencia está contenida y que las cifras han bajado, los datos del mes pasado y la experiencia cotidiana de los ciudadanos cuentan una historia diferente.
Nuevo León enfrenta un reto urgente en materia de seguridad. Para recuperar la confianza de la población, es necesario que las autoridades estatales reconozcan la gravedad de la situación, transparenten los datos y rediseñen una estrategia efectiva que priorice la prevención, la investigación criminal y el fortalecimiento institucional.
Mientras tanto, los habitantes de la entidad siguen esperando respuestas, resultados y un verdadero compromiso con la seguridad pública.